jueves, 13 de agosto de 2015

"Conversando sobre Budismo Tibetano", junto a Adela Pino

Este miércoles 12 de agosto estuvimos junto a Adela Pino, "Conversando sobre Budismo Tibetano", y cómo el Budismo interpreta las distintas dimensiones del ser humano, como la vida, la muerte, la enfermedad, la felicidad y el sufriminto.

Adela nació en Santiago en 1938. Es costurera y madre de tres hijos. Se inició en el budismo hace cuarenta años y ayudó fundar la primera escuela de budismo Chile. Hace 33 años decidió tomar los votos como monje budista y se construyó una pequeña cabaña en las montañas cerca de Santiago de Chile, en el Cajón del Maipo. Hace veintidós años, una vez que sus hijos estaban grandes decidió irse a vivir a la montaña, desde donde se dedica a impartir talleres de medicina tibetana y realizar su práctica budista. Actualmente imparte un taller de budismo tibetano para niños.

Mensaje Adela

Cuando uno logra tener la mente quieta. se mejora la salud, se aclara la mente, se logra comprender a los otros. 

La meditación está íntimamente ligada a los canales sutiles, que se nutren de un prana sutil, que se obtiene sentándose en la postura apropiada, controlando la mente lo mejor posible según las instrucciones del maestro.

Buda dice que nosotros tenemos 84 mil emociones negativa, que producen 84 mil tipos diferentes de trastornos o enfermedades. Buda dice que todos los seres que respiran, sean estos animales, humano y demás, estamos expuestos a distintos tipos de sufrimiento. En la medicina tibetana se cree que tanto como si estamos sanos como si no, básicamente todo estamos enfermos, tenemos la enfermedad en forma dormida, latente.
Buda dice que nosotros los seres humanos nos enfermamos por causa de nuestras emociones perturbadoras. Se habla de que el odio y el deseo producen una infinita cantidad de trastornos. Buda dice que los factores que provocan las enfermedades son de dos tipos: las causas y las condiciones. Las condiciones capacitan a las causas para que éstas se manifiesten como una enfermedad específica. Las condiciones son la base para que la enfermedad se manifieste y aparezca la causa.

La medicina tibetana no separa la mente del cuerpo. La mejor dieta es la que está constituida por los seis sabores. Para comer, masticar muy bien. Las dietas son personalizadas, depende de la energía predominante de la persona. Es muy importante la alimentación, porque de ahí generas las energías.Cada alimento tiene un poder sobre los órganos.
El ser humano es un ser complejo. No tiene mucha información sobre cómo está conformado su cuerpo, y no sabe lo que es bueno o malo para él. Las emociones perturbadoras te llevan a desear y desear muchas cosas que pueden hacerte mal. 

Ojalá todos los seres se iluminen y hagan análisis de sus propias faltas y traten aunque sea en pensamiento en mejorar, y les aseguro que este país sería otro. Para ser más feliz practicar el desapego al cuerpo, a las posesiones, al pasarlo bien, evitar eso.

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